¿Maltratar a la mujer? Ni con el Pétalo de una Rosa



“Niño a las mujeres no se las toca ni con el pétalo de una rosa”, esta es una de las frases con la que los padres intentan
inculcarle a sus hijos el respeto hacia las mujeres, pero en la
violencia
práctica ¿Se cumple con la premisa de esta?, ¿Son las mujeres
respetadas y cuidadas de tal forma que ni un solo pétalo
llegase a tocar sus venerados cuerpos? Sólo en Ecuador, durante el pasado 2009, “el 64% de las
muertes publicadas en los diarios fueron por violencia machista”,
esto según una publicación de la presidencia en un
texto del MIES (Ministerio de Inclusión Económica y Social).
Además, señala que en los últimos tres años se han recibido
alrededor de 250.000 denuncias de mujeres que han sufrido
algún tipo de maltrato.
Como respuesta al aumento de la violencia contra las mujeres,
Reacciona Ecuador
niños y adolescentes del Ecuador, y a través del Plan Nacional de Erradicación para la violencia de género, se ha puesto en marcha la campaña  “Reacciona Ecuador el Machismo es Violencia”, esto para crear una conciencia de respeto y que la 
ciudadanía reconozca y rechace de raíz todo tipo de violencia. “La violencia contra la mujer de todas las edades y condiciones económicas, sociales y culturales, no es normal y natural. 
Es una violación de derechos humanos que pone en riesgo sus vidas y que perjudica el desarrollo del país” 
enfatiza el texto de la campaña del MIES. Pero la implementación de esta campaña no ha sido la única reacción, de los gobiernos de turno en nuestro país, respecto a la violencia contra la mujer, puesto que, con
el trabajo conjunto entre los organismos internacionales, el movimiento feminista, las organizaciones de mujeres y mecanismos de gobierno han logrado a través de los años crear en el país dependencias de ayuda a las mujeres maltratadas. 
Es así que a partir del año 1994 se crean las Comisarías de la Mujer y la Familiaen 1995 se expide la Ley 103 “contra la violencia de la mujer y la familia” y en la Constitución Política del Ecuador de 1998 se incluyeron artículos con visión de género, intentando con esto salvaguardar, de alguna manera, la vida de las mujeres ecuatorianas.
Pero, ¿es esto suficiente para acabar con el maltrato?, en  países como Brasil, Bolivia, Colombia, Chile y Argentina, presentan índices altos de casos de violencia contra la mujer, en este último se registra un promedio anual de 3.500 casos de violencia doméstica, y 5.000 casos aproximadamente de abuso sexual según el Centro Municipal de La Mujer, en Buenos Aires. Mientras que, en países pobres como Haití, se detectó que de entre 1.750 mujeres el 70% había sufrido violencia doméstica y que un 36 % de los agresores eran sus parejas sentimentales, todo esto mediante un estudio realizado por el Centro Haitiano de Investigaciones y Acciones para la Protección Femenina.
Regresando a nuestro país y según un informe presentado por la UNIFEM, se dio a conocer un listado estadístico relacionado con las 20.475 denuncias recibidas por las diferentes Comisarías de la Mujer dando los siguientes porcentajes: El 93% de las personas agredidas eran mujeres; el 60% de las mujeres agredidas estaban entre los 21 y 25 años de edad; el 79% de las mujeres agredidas tenían un nivel de instrucción incompleta ó completa; el 79% de las mujeres agredidas tenían una relación de pareja estable; el 55% de mujeres denunciantes tenían más de 7 años de relación con su pareja; el 65% de mujeres maltratadas denunciaron violencia física, el 18% sexual y el 99% psicológico.
Dentro de las denuncias de violencia sexual, el 93% denunció sexo obligado; el 85% de casos de agresión se da en el hogar y el 33% de agresiones a las mujeres se da cuando el agresor se encuentra en
estado etílico. Según entendidos en la materia el maltrato surge entre los diferentes estratos de la sociedad, por lo general, el hombre maltratante proviene de una familia de maltratadores por lo que se le hace normal este tipo de conducta que refleja en la sociedad la necesidad urgente de campañas de prevención del maltrato desde y en el hogar.
¿SE PUEDE EXTIRPAR EL MALTRATO?
El que el maltrato desaparezca definitivamente de las sociedades mundiales depende de la firmeza con la
que  se lleven a cabo todos los programas que buscan desaparecerlo para siempre.
En la década de 1970 las feministas analizaron el alcance de la violencia y a raíz de esto se crearon centros de acogida y de ayuda para las mujeres
maltratadas y sus hijos debido a que estos son los que más sufren las consecuencias de vivir dentro de un hogar lleno de maltrato. Crear programas como el implementado por el Gobierno muestra el interés de este en acabar con un mal arraigado, lamentablemente, en nuestro país, pero, es a su vez, un llamado de atención a abrir los ojos y no permitir que la estupidez de ciertos “HOMBRES” nos quiten a nuestras mujeres, principal motor de esta y todas las sociedades del mundo.

By: @gersonngamboa

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